Rosquillas de Homero Simpson
Ingredientes para 8-10 rosquillas
Para la masa:
- 125 ml de leche
- 1 naranja (su piel)
- 225-250 g de harina de trigo
- 40 g de azúcar
- 25 g de mantequilla
- 8 g de levadura
- 30 g de huevo (1/2 huevo
"M")
- sal y aceite de girasol.
Para el glaseado:
- 100 g de azúcar glass
- 2 cucharadas de agua caliente y colorante alimenticio de
color rosa.
Cómo hacer rosquillas de Homero Simpson
Pelamos la mitad de la naranja, procurando no cortar la
parte blanca ya que esta amarga. La ponemos en una olla junto con la leche
y llevamos a ebullición.
Inmediatamente después, retiramos la olla del fuego y
dejamos enfriar antes de continuar usándola.
Mientras tanto, tamizamos la harina sobre una superficie de
trabajo limpia.
Le agregamos el azúcar, una pizca de sal, la mantequilla y el
impulsor.
Mezclamos y hacemos un hueco en el centro. Añadimos el huevo y la
leche atemperada, previamente pasada por un colador. Mezclamos y amasamos
hasta obtener una masa homogénea, lisa y satinada.
Si notáramos que la masa queda pegajosa, agregamos más
harina y amasamos hasta incorporar al resto de la masa. Siempre en pequeñas
cantidades para no pasarnos y evitar que nos quede demasiado seca, porque esto
arruinaría la textura de nuestras donas.
Cuando la masa esté lista, la boleamos, cubrimos con papel
transparente y dejamos que repose por espacio de 45 minutos dentro del
refrigerador. Mientras tanto, cortamos cuadrados de papel sulfurizado de unos
9x9 cm o del tamaño que queramos hacer nuestras rosquillas. Si las
queremos pequeñas, con cortar 10 tendremos suficiente.
Si los hacemos grandes,
cortamos ocho.
Transcurrido el tiempo de reposo de la masa, la
sacamos del refrigerador y la dividimos en 8-10 porciones iguales.
Boleamos cada porción, aplastamos sobre los cuadrados de papel y hacemos un
agujero en el centro.
Cortamos los bordes con un cortapastas del diámetro
deseado y la parte interior con otro más pequeño.
Retiramos los sobrantes,
podemos utilizarlos para formar más rosquillas.
Calentamos abundante aceite en una sartén y freímos
las rosquillas a fuego suave junto con el papel.
Notaremos cómo se hinchan
al contacto con el calor y adquieren su característica forma. Cuando la
parte inferior se haya dorado, volteamos y colocamos las rosquillas nuevamente
sobre el papel para que se cuezan por el otro lado.
Retiramos del fuego y escurrimos sobre papel
absorbente para eliminar el exceso de grasa. Repetimos la operación tantas
veces como sea necesario, cuidando siempre de controlar bien la temperatura del
aceite para que no se quemen por fuera y queden crudas por dentro.
Cuando las rosquillas estén frías, preparamos el
glaseado.
Mezclamos el azúcar con el agua.
Usamos sólo la
mitad y vamos añadiendo poco a poco para ajustar el espesor y que no
quede demasiado líquida. Agregamos una pequeña cantidad de colorante (con la
punta de un palillo será suficiente) y removemos.
Colocamos las donas sobre una rejilla metálica,
protegiendo la superficie con papel absorbente, y cubrimos cada una de ellas
con el glaseado rosa, ayudándonos de una cuchara.
Espolvoreamos con virutas de
colores y dejamos secar antes de servir.
Receta de CARMEN TÍA ALIA